27 mayo 2013

Dame un euro papa


Los García, así son. Menudo esto de ser de los García, que es un apellido muy común, pero para eso están las familias, para darle la peculiaridad que se necesita para ser una familia única. Mi abuelo era García García, así, de dos en dos. Así que todos los demás hemos venido heredando Garcías hasta el infinito.
El otro día en mi Primera Gran Boda Gallega estuve reflexionando, poco, unos momentos
Y bueno, te casas, te pones un anillo si eso, eres esposo, tienes compromisos legales, días libres por hospitalización y demás historias. Pero eh, cambias de Señorita a Señora.
¿Y cómo sería eso de cambiar de apellido?
En otros países así lo hacen, menudo telar. ¡Que te cambian el nombre! ¡Jésus! ¡Qué descoloque! Cambiar los papeles, tus iniciales, hasta tu firma ¿no? Cambiar tu nombre al rellenar encuestas, o papeleos importantes.
Menos mal que no cambiamos de apellido. A mi el mío me gusta mucho. De pequeña creía que tenía un nombre con poca chicha, pero cada vez me gusta más mi apellido.
Y que pena cuando en las familias no hay más que chicas y el apellido se pierde ¿verdad? De momento, que en unos años será algo común, parece raro cambiar el orden de los apellidos, pero hay algunos, como el mío por ejemplo, que no deberían perderse nunca.
Dame un euro papá, dame un euro mamá...

1 comentario:

beizabel dijo...

Qué te parece, que la García Marcos està pensando en pasarse al Mc Güayer... Y tiene unos dilemas que pa qué.