01 septiembre 2014

Amor a la gallega


Como el raxo, el caldo, el albariño, la zorza, el mexillon, las castañas. 
Como el lacón, como el pulpo, AMOR a la gallega.

El gallego es puro amor, pero no ese pasional adolescente al borde del coma etílico. 
Es amor de andar por casa. 
Es el amor de un matrimonio en el que ambos miran con desprecio por pasados los cincuenta; que se despierta de una siesta de orinal y manta, y que para disimular el bostezo, ella mira a su marido y le dice, con la potencia del "sí quiero": “Cariño, creo que roncas”. 



En septiembre se termina la jornada de verano, que no el verano, pero ya casi casi que se va viendo el nuevo curso. No hay época mejor en el año que el comienzo del otoño.
Este curso será especial, hombre que sí. Como todos los nuevos cursos. Pero este más.
Este nuevo curso irá cocinado a la gallega, con toda su gracia y con todo su amor.
Ya nos iremos contando...

¡Qué bien cuando un mes empieza en lunes!

1 comentario:

abbie gold dijo...

claro que sí!!!!
los gallegos smos muy majos