Todo al rosa

Ahora lo entiendo todo.
Ha sido hace nada cuando lo he descubierto, pero ahora ya lo entiendo todo.
Ya se porque el rosa es el color de las chicas.

Es un color que, en principio, y así para la mayoría de ellos, es intocable para el género masculino.

Así que, en los hogares de dos, y en todos los casos en los que haya una convivencia entre géneros, la única manera de que cada uno use lo suyo es que las cosas de las chicas sean rosas.

Eh! Amiga, ¡atiende! si vives con un chico; tu cepillo de dientes, rosa. La esponja, la toalla, rosa. Tu servilleta, rosa. El frasco de colonia, rosa. La ropa interior, rosa. Ellos no distinguen, objeto que ven, objeto que pillan. Excepto si el objeto es rosa.
Si no quieres que te choricen, hasta los calcetines, rosas.

Los chicos identifican claramente el color rosa. Y no se identifican con el.

Lo diferencian a la primera del resto de colores.
Usar objetos de color rosa es la única manera de que los chicos no se líen y no acaben con usando todas tus pertenencias.
No es discriminación, ni nada chorra.

Esto va en serio amiga, usa el rosa.

Y en verano más. Así que Provincianas se va a tomar un poco de zumo rosa, o tinto de verano con naranja, para inspirarse en sus planes veraniegos.
En agosto nos tomamos el próximo lunes de vacaciones, ¿si o qué?
Si por-fa-vor