14 noviembre 2006

El Inframundo

Al fin en casa, hogar dulce hogar, esto es con mucho el mejor momento del día. Pero para entender por qué debo seguir explicándoos lo que hay q pasar para llegar aqui. Así que hagamos un pequeño flash back y volvamos al tan ansiado asiento de metro.

Así que ahí estás, tranquila, esperando que llegar tu destino, pero esa tranquilidad se convierte en desasosiego cuando a dos centímetros de tu nariz te encuentras un culazo que parece no tener dueño del que solo esperas que no te de los buenos días, y pegado a él otra lección de anatomía pero esta vez es el frontal. Y te preguntas ¿ qué les hace decidir en mostrarte unos encantos u otros? Supongo que cuando me toque a mi dependerá de los pantalones que lleve o a quien tenga que "presentarme"jeje (sí, vuelve a sobrevolar el fantasma del sexo, pero todavía no). En realidad no se sabe muy bien quien está más ridículo si ellos con sus meneos de surfero al ritmo de los traqueteos del metro o tú intentando disimular que no está viendo aquello que está pegado a tu nariz.

En las siguientes paradas se va despejando el vagón, porque tú evidentemente tienes que hacer al menos cuatro, y es entonces cuando empiezas a ver el desfile de máscaras del inframundo.Pero cuidado porque ellos también observan y se puede dar el tan odiado cruce de miradas, en el que piensas : " ¿Por qué me está mirando?", yo le miro porque jamás saldría así vestido a la calle, ni con esos pelos, y porque me recuerda a la mala hostia que tiene la naturaleza a veces, pero por qué coños me mira él. Y entonces descubres una de las ventajas del metro: los cristales en el túnel hacen efecto espejo, así que aprovechas para comprobar que no te ha salido ningún cuerno y que no tienes el pijama por debajo de la ropa ni nada así. Ah, será que tengo algún tipo de expresión en la cara que delate mi condición de recién llegada al inframundo.

Vale, voy a intentar no centrar la mirada en nada en concreto, a ver que puedo oir............. joder, si no se oye nada, increible pero cierto, estás en un sitio lleno de gente y lo invade todo un incómodo silencio, no sé muy bien por qué pero es incómodo. Pon a toda esta gente en un bar ya verás que voces, en fin, cosas del inframundo. Se abren las puertas y entrar dos niñas de quince años, con unas mochilas hasta las rodillas que hacen que la palabra ergónomico pierda todo su signficado, llevan exactamante el mismo peinado que consiste en una cola de caballo de la que sobresalen dos mechones por encima de los ojos que responden al mismo principio de comodidad que la mochila y a absolutamente ningún principio estético. Son estas dos miembros de la llamada tribu de los "sin pies" porque nadie se los ha visto nunca, esos pantalones indescriptiblemente anchos lo impide. Bueno por lo menos seguro que el tio de antes ha dejado de mirarte. Y empiezas a oir:

- Jo tia, que fuerte tia, el Jonathan se llevo a la Vane en moto y dice la Loren que les vieron morreando en el parque. Q fuerte tía, y eso que ya había decidido que el iba a ser el primero, pues que se joda que el Josete también me lo ha pedido

NOOOOOOOO, DIOS, PODIA VIVIR SIN TENER QUE OIR ESTO, que vuelva por dios, que vuelva el silencio incómodo¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Uy¡ mi parada. Bueno por fin, llega la hora de subir a la superficie. Me dirijo a la salida siguiendo las señales, que son sin duda las mejores señales del metro,relajada, no hace falta ticket, pegarme con nadie por pasar.... me subo en las escaleras eléctricas, y de repente, alguien me toca en el hombro, pero qué coño pasa ahora¡¡ me das la vuelta y me encuentro con una fila de gente con mala cara pidiéndome paso. Joooder me he puesto en el carril rápido, y ya no tengo sitio en el de lentos, así que me toca correr hacia arriba. Puffff, menos mal que vine sentada.....

ELENA

2 comentarios:

sacris dijo...

Jajajaja, esta mañana me encontre con dos chicas como las que dices, pero esta vez hablando de sus profesors "jo tia, ¿te puedes creer que le caigo mal a esa hija de puta y no me ha dado clase en la vida?"

minaya dijo...

Bienvenidas a Madrid y a la blogosfera!
Abrazos!